Talleres de Chi Kung y Mantras
El porqué de la práctica conjunta de Chi Kung y Mantras
La idea de aunar estas dos disciplinas en un solo taller viene, como sucede en muchas ocasiones, de mi experiencia propia, después de años practicando cada una de ellas por separado.
Y es que, me di cuenta de que después de la práctica de Chi Kung, en la que ejercitamos el cuerpo con movimientos lentos y armónicos, acompasados con la respiración y con la mente enfocada en la observación de la energía que se mueve dentro de nosotros, se creaba un escenario perfecto para adentrarnos en la recitación de los Mantras, ya que esto requiere un estado calmado, consciente y enfocado con el fin de que la vibración que provocamos al pronunciarlos, encuentre un “universo” de silencio interior y no tenga que competir con el ruido de la mente de lo cotidiano.
¿Cómo es un taller?
Cada taller tiene su propia identidad dependiendo del Mantra que lo defina, pero todos tienen una estructura común en la que el Mantra protagonista va eligiendo los movimientos más acordes a su vibración.
Estructura
– Presentación de los participantes para crear un ambiente más distendido
– Calentamiento articular consciente; lubricando cada articulación con movimientos suaves y fluidos.
– Estiramiento de meridianos con el Palo medicinal; utilizando esta herramienta conseguimos mejorar el flujo de la energía estancada, mejorando el funcionamiento de nuestros órganos internos.
– Movimientos de Chi Kung para relajar cuerpo y mente; con ellos conseguiremos un estado más propicio para más tarde adentrarnos en la recitación de los Mantras.
Descanso de 30 min. Una infusión y un tentempié siempre reconfortan después del ejercicio.
– Presentación teórica del Mantra que vamos a practicar; realizando un primer acercamiento al significado superficial de lo que vamos a experimentar.
– Recitación en 3 ciclos; según la longitud del mantra hacemos ciclos de 300/500 repeticiones para que la vibración penetre en cada célula de nuestro cuerpo, con descansos para la observación de unos pocos minutos entre cada ciclo.
– Observación de sensaciones físicas, mentales y emocionales que la recitación ha suscitado en cada uno de nosotros.
– Compartir; en este tiempo el verbalizar lo que hemos sentido nos ayuda a comprender no sólo nuestra experiencia, sino el entender que en cada uno el Mantra actúa como una entidad viva, dando a cada uno lo que en ese momento necesita ver con claridad.
– Cierre
Vive la doble experiencia
Prepara tu cuerpo y tu mente para recibir el entendimiento más profundo de los Mantras